La primera impresión jamás se olvida...

La realidad es que nunca tenemos una segunda oportunidad para causar una buena impresión, por lo que resulta evidente el papel que juega hoy en día el empaque como herramienta para vender. Las empresas día con día trabajan para lograr empaques con diseños atractivos e inteligentes que enamoren a primera vista y que sean funcionales para los clientes.

Uno de los pioneros en empaques funcionales y originales sin duda fue Pringles ¿Papas fritas en lata? ¿A quién se le ocurrió? Las Chips vienen en bolsos de plástico laminados, apilados perfectamente en un tubo. El éxito de Pringles se debe en gran parte a su empaque (inventado por Fred Baur), el cual consiste en un cilindro de cartón cubierto por papel de aluminio y también una tapa de plástico la cual puede ser utilizada tantas veces como se desee, estas botanas también tienen una forma y tamaño uniformes lo cual permite apilarlas dentro del paquete aprovechando muy bien el espacio y evitando que se rompan.

El nombre de Pringles viene de una calle en Cincinnati, Ohio. Las personas que escogieron el nombre lo hicieron porque les pareció que sonaba bien y era divertido y El lema publicitario de Pringles "Cuando haces pop, ya no hay stop", que en su versión inglesa original es "Once you pop, you can't stop" definitivamente las hizo sensación en los años 90.

Cuando Fred Baur muere el 4 de Mayo de 2008 dejo en su testamento la voluntad de ser incinerado y que sus cenizas sean depositadas en un bote de Pringles, para honrar su orgullo al diseño y su entrega completa a la compañía. Parece una falsa leyenda urbana, pero es una anécdota totalmente cierta.

Ahora sabemos que el éxito de un producto depende de varios factores, aunque el empaque suele ser el mas divertido.